¿Qué está pasando con el Anime?

Para empezar, que no se tomen a mal los otakus mi artículo (otakus,sí, que se etiquetan dentro del glosario del frikisimo mundial desmesuradamente), pues lo que aquí expongo es una simple opinión personal, que puede ser válida entre vosotros o no, pero yo creo que como aficionado que era al anime japonés, debo comentar. ¿Qué les pasa a los animes ultimamente?, una moda que se extiende desde los noventa (para mi su mejor época) hasta la actualidad de una manera extensa, con un amplio contenido de género y público. ¿Quién no ha disfrutado con grandes series como "Dragon Ball", "Los Caballeros del Zodiaco"?, una larga lista de series míticas que ya están en la historia del aficionado. Lo que hoy en día me parece un sin sentido es el otaku de a pie, obsesionado por considerarse friki (no sé muy bien en que sentido más o menos estricto de la palabra) tragándose sin demora TODOS los animes que salgan, sin vacilar, más de 30 o 40 series a la vez, algunas sea dicho de paso, sin ninguna calidad narrativa, cosa que ahora comentaré.

Porque, no nos engañemos, aunque una serie como "Naruto" esté en boca de la actualidad, y puede que medianamente tenga capítulos dignos (cosa que no comparto, los 3 primeros episodios no consiguen enganchar ni narrar nada al espectador, por lo tanto pierde) es una MODA, que pasará como todas las modas, y de hecho así está siendo ya. Los animes por mucho que me cueste decirlo ya no son lo que eran, ahora la moda está en contar historias de amor para las jóvenes (con valores totalmente insulsos y sobreactuados, más incluso que los que Hollywood y Disney hayan podido meter en cualquiera de sus films), surrealismo cómico con un humor demasiado enrevesado y facilón (nuevamente exagerado), o la acción más frenética que el ojo humano no pueda seguir (parece que esto mola hoy en día, no lo entiendo). Aunque también hay pequeñas "joyitas", ejemplos que yo haya podido ver, pues tenemos la magnífica "Hellsing" (la original), "Golden Boy", "Gantz" o "Full Metal", series con una duración establecida (con principio y final), que terminan bien y puedes ver sin aguantar guiones vacíos de 300 episodios. En realidad nunca he tenido nada en contra del anime, pero como todo lo que se sobrevalora hoy en día, hay que saber ser preciso a la hora de ver calidad dentro de él, y no porque seas más otaku que nadie (incluso por ver también hentai [mangas eróticos-porno] como muestra de pseudo intelectualidad del otaku listillo, además también de ver todo en versión original Japonesa, cuando, las películas en inglés subtituladas las rechazan con prejuicios, toma hipocresía y mediocridad del mal otaku) tienes que ser un experto audiovisual y quedarte estancado en el anime como arma de destrucción social. Reitero, el anime está perdiendo lo esencial, su calidad, hay más cantidad, sobran demasiadas series, hay genialidad, claro que sí, pero a mi ya me llama cada vez menos extrañamente, y empiezo a "odiar" a los otakus que solo saben apreciar este arte como único, sobrevalorado, que realmente cuesta bastante visionar con cierto equilibrio, antes esto no pasaba. Venga ya podéis matarme...