2009/06/11

Pienso/Siento

Llevo un ratito pensando en algo que me ofusca desde hará unas semanas. Está afectándome tanto que realmente es casi bipolar, también anímicamente relativo en el tiempo lo que me viene, lo que siento. Sé que es cierto porque ahora tengo un tremendo dolor de cabeza causado quizás por este hecho y que no pienso disminuir con una pastilla que drogue y engañe mi cuerpo, quiero “sufrirlo” de verdad, pues de ahí deriva todo, hace poco le decía a alguien que me solía gustar vivir para y con la desgracia. De ahí salen las ideas, pequeñas filosofías ( grandes quizás, modestia aparte…) el aprendizaje. Me parece increíble que gente que tenía a mi lado y de la cual de un modo u otro era afín, se hayan ido lejos, o lo más frustrante: se han esfumado estando muy cerca. Entended esto de manera literal y metafórica a la vez por favor, os pido ese pequeño esfuerzo. De ahí paso a pensar que cada vez espero menos de alguna cosa, de alguien e incluso de mí mismo. Los objetivos son buenos, pero a veces son espejismos, es curioso amigos, cuando más pienso en eso, no esperar nada de absolutamente nada, más relajado estoy, más pasivo, más feliz (si se le puede llamar felicidad, algo que creo que nadie conoce bien, ni llegará a conocer, todo eso es abstracto, solo el ratón Mickey es feliz, pues era un dibujo animado, y aun así hay dibujos que no consiguen eso, el ejemplo más claro es el coyote, toda su vida justiciado y tildado de cabrón por la audiencia…). Pensar todo esto, me hace sentir bien, pero a su vez, la conciencia rastrera cual angelote gordo (a lo Padre de familia, por seguir con el símil animado) me dice que todo eso está mal y vuelvo a caer en la profunda reflexión, lucha entre bueno o malo, he aquí el déficit humano. La poderosa capacidad maquiavélica de perdición, “pululación” que nos hace débiles, en mi caso, quizás veo esto tan realista que eso otro que llaman realidad y que es tan dura cual muro, me asusta, porque no hay esperanza de nada, esperanza de aferrarse a algo, vuelvo a lo mismo. ¿Porqué coño no me aferro yo a nada? Simplemente no quiero, eso es lo que siento, es complicado porque tarde o temprano, el ser humano, imperfecto y con sus fallos, siente apego por la humanidad, por lo que le rodea. Aquí acabo no llegando a ninguna conclusión, no la hay, no intenten entenderlo, no existe.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Y volvemos a tener otra "simbiosis" mental...o en este caso de sentimientos.
Tengo que admitir que mis "mejores" (porque a nivel personal los considero así) guiones,proyectos e ideas siempre surgen de cuando estoy más decepcionada. Están en el cajón de los recuerdos junto a esa coraza que llamamos humanidad.
Es curioso que la mayóría de obras maestras surgen normalmente de un tremendo dolor...y después del vacío que te queda.
Cómo el último cigarrilo que me fumo, cómo el último suspiro antes de dormir y cerrar los ojos.
Las personas más cercanas, incluso las de la calle de al lado o que ves todos los días, son las que más se alejan de tí ( a veces con un porqué que disipa el tiempo).

No nos hacemos ni mejores ni peores personas...sino que simplemente nos deja en eso, en personas y personajes con una especie de "arco de transformación"

¿Quién da más? La misma vida lo hace.

Espacio patrocinado por reflexiones sin sentido a altas horas de la noche.

Un saludo con boli bic azul en la mano y con apuntes, R.Gómez

DASKABE dijo...

Muy bien.

Pero relaja la cabeza, que a veces nos fustramos solos, y los demás no se fustran por tí, porque ni piensan en tí, aunque luego te digan que sí.

Saludos loco.