"Mulholland Drive": Es hora de despertar...

"Mulholland Dr." es la primera obra de David Lynch que tengo el honor de contemplar en mi vida cinéfila. Todo un lienzo lleno de colores de todo tipo, surrealista y quien sabe si coherente o no, lo que está claro es que solo el señor Lynch podía haber rodado esta película. Vamos allá:

Una joven alegre, frágil y algo ingenua, Betty (Naomi Watts), llega a Los Angeles dispuesta a ser una gran actriz , y se aloja en el apartamento prestado por su tía. Allí se encontrará con Rita (Laura Elena Harring), una mujer amnésica, única superviviente de un accidente en la carretera de Mulholland Drive. En la misma ciudad, un egocéntrico director de cine ve cómo tiene que someterse a los productores de su película, que le imponen a la protagonista. Las tres tramas se entrecruzarán misteriosa y oscuramente en búsqueda de su identidad perdida, con personajes que se debaten entre el amor y la muerte, entre el éxito y el fracaso.

Clasificar argumentalmente el guión de "Mulholland Drive" es quizás uno de los inconvenientes o aciertos de su director. El señor Lynch nos cuenta una historia que a priori no es sencilla, pero dentro de su globalidad encuentra una coherencia y un sentido cinematográfico tremendo, creedme. Aunque por otro lado, el libreto evoca diferentes sentimientos al espectador, el aire tétrico-surrealista y abstracto que impregna cada pasaje del libreto es tremendo. Hipótesis de mil formas y colores se podrían sacar de la película, ya que una vez la has visto tienes que quedarte con una opinión muy personal, quizás sin llegar a entenderla del todo, pero de eso se trata, el cine de Lynch evoca cosas, te hace pensar, y sin duda, consigue contarlo todo desde un prisma original, dando la vuelta a la tortilla (digamos que todo es reminiscente en la parte final del film, pero en realidad el desenlace es la reminiscencia real a TODO el film), haciendo el juego más rebuscado que existe, el juego de engañar al espectador con buenas artes. Cambios de identidad, giros inesperados al final (lo mejor sin duda) personajes extraños, el surrealismo extremo, una historia de amor y atracción sexual entre dos mujeres, una madurada crítica a los estudios Holywoodienses, una carretera, Mulholland drive, el punto de giro a toda la película, el truco más elegante que he visto en un guión, el engaño más estimulante, Lynch usa las localizaciones como punto de unión, de liberalismo emocional de sus personajes, enorme. Surrealismo que evoca los sueños, los miedos y pesadillas más escalofriantes, sí, también es un film de terror tremendo, humanizado hasta llegar al límtie de lo imposible (o pasándolo), pero tocándo ciertos aspectos del suspense más inquietante. En fin, un guión UNICO, se haga la interpretación que se haga, yo tengo mi idea, pero, hay que verla para saber que es lo que nos están contando, que es lo que nos dice a cada uno, supongo que es como esas poesías que no entedemos del todo, pero que aún asi nos evocan grandes cosas y nos encantan.

Vamos con el extenso y variopinto reparto del film. Caras conocidas, la guapísima y excelente casi siempre, Naomi Watts, un papel que al principio he de admitir que me pareció muy forzado, pero que luego me dió una bofetada, ya que su media hora final es de una evolución y trasgesión impresionantes, un diez para Watts. Junto a ella la sensual Laura Elena Harring, gran aportación que lleva las bases del film junto con Watts, genial también.Justin Theroux, el director de cine, un personaje muy logrado, forma parte de mucha de las historias secundarias del film, aportando ensoñación al conjuto, sabréis porque digo esto si entendeis como yo algunos aspectos.El resto de secundarios excelentes todos, por ahí asoma también Ann Miller en un personaje muy curioso. En fin un reparto amoladado al film, con el peso de las féminas que llevan la historia, destacando a Naomi Watts, un personaje que parece relativamente importante pero que realmente es el personaje protagonista de la historia, o no...

En lo técnico la película es impecable. David Lynch me ha sorprendido (y mucho) en su manera de rodar el film. Desde un uso milimétrico de ciertos planos quizás hasta el punto de la pedantería mas agobiante (en el buen sentido) usando la steady-cam, la angusutiosa vista subjetiva en casi todas las secuencias (especialmente en la primera del restaurante, da miedo de verdad). Los experimentales, sobretodo al final, usando el desenfoque, las luces y los planos cortos. La sutileza sexual de ciertas escenas es increible (la escena donde Naomi Watts lee su texto con un actor de manera totalmente diferente a su ensayo es impresionante). El nivel narrativo de Lynch es adictivo, la película te deja entrar de lleno para no soltarte hasta el final, y eso dice mucho de ella. Ojo a la fotografía, muy personal, no sabría como definirla, quizás el término más adecuado sea "lugubre". Al igual que su banda sonora, llena de elementos electrónicos y con un fondo tenebroso de lo más estridente (aunque no lo sea), tremenda. Las escenas, hay muchas escenas realmente brillantes, quizás cada uno se quede con las suyas o con ninguna, yo me quedo con: La del restaurante, donde uno de los personajes cuenta a otro una pesadilla propia y la vive en la trastienda del restaurante, increible. El final, realmente bueno, desde el momento SPOILER de la caja azul hasta el final, para interpretar todas las cosas posibles (el cenicero es un detallazo que hay que tener en cuenta para entender la paranoia en la que se embarca el desenlace final). La reunión de los productores y el cineasta, el personaje esporádico del vaquero, las escenas lésbicas tan bien rodadas, y SOBRETODO la parte en el teatro del silencio, con una de las escenas mas bellas e inquietantes que he visto SPOILER, la cantante que se desmaya en mitad de su canción FIN SPOILER gran parte.

Quizás lo único malo sea, en todo caso, que la película NO SE ENTIENDA con una verdad absoluta, ya que hay que sacar una conlcusión propia. Es una de las películas mas extrañas e impresionantes que he visto ultimamente, creo que merece la pena verla, ya sea para amarla evocativamente hablando, o odiarla en TODOS los sentidos posibles. Lo que si está claro es una cosa: ¡Silencio!.

NOTA:9/10
RECOMENDACIÓN: Verla para creerla. Sacar conclusión propia.
DURACIÓN: 145 min
AÑO: 2002