Atrapado

Recuerdo ahora lo que mi madre me decía: "Nada es imposible, menos la muerte", al recordarlo me alivio por tener un huequecito de luz por el que sale el humo. Por otra parte hoy siento que no entiendo porque algunas personas eligen morir, quizás si que me importe la gente a pesar de todo, quizás me haya dado cuenta de mi idiotez cuando mi entorno ha sido el protagonista del peor cortometraje que he oído contar. Auna bastantes cosas, recuerdo la última vez que lo vi y entiendo otra vez, mi idiotez. Todo lo que critiqué, eso de los simbolismos ocultos en las palabras que defiendo como poco común que creo ver poco en la gente de hoy, la metáfora, la ironía, las palabras sinceras que me tomé sin importancia alguna, todo eso me lo comí, lo ignoré, y él lo tenía. No siento culpa porque si uno opta por quitarse la vida, alguna razón tendrá por cobarde que suene el hecho en sí, la vida no le iba mal a simple vista, pero eso es otra vez una ignorancia por mi parte, ¿Qué más da que la vida te vaya bien para acabar atrapado?. "Atrapado" fue su obra, mensaje claro y directo, reflexivo, introspectivo si se ve, se entiende y se compara con la vida del autor, cosa que no hice, de nuevo, infame de mí, que voy pregonando a los cuatro vientos mi algarabía simbólica sin importarme que se entienda porque así me siento superior según creo ahora mismo, eso me duele, pero no me culpo joder. No entiendo de nuevo, el que decidió dejarnos con sus ideas frustradas, con conversaciones en una bonita cafetería (la más bonita de todas en ese pueblo que siempre he visto horrible, Torremolinos) cual ironía agazapada, donde disipábamos humo de un futuro idílico, donde me decía curiosamente con una sonrísa: ¡Luigi, que cosas más tristes escribes en tu blog!, donde recordaré siempre unas palabras que aquí escribí en su tiempo, todo eso se ha ido sin avisar apenas, se esfumó con la encapuchada, joder. Para mí era modélico en cierto sentido: Gran trabajo y dinero, una casa para ti solo (lo que casi siempre he soñado hacer sin miedo, hasta ahora), y vale, era exigente y se frustraba con la gente, con el medio, con él, con el mundo, desmesurado, sí, pero yo también soy así, él era siempre así, era normal, o eso creíamos todos. La gente modélica es optimista, hasta hoy.

Trazando una telaraña de sueños perdidos y yo escribiendo en su maquina de escribir sin tinta a la que llamé "La Bella Confusión", se anunció sola esa cosa tan hija de puta llamada muerte, se fue atrapado, atado, frustrado, como en su corto que tanto autocriticaba. A mí, me abre un abanico extraño, lleno de vida, pero por otro lado de miedo a. Pues también es una lección kafkiana sobre la pretensión del ego que hay que controlar, tratemos de entender, yo el primero, la importancia de liberar al atrapado sin darle un discursito moral, apático, borde, bebedor de delirios de grandeza como yo hice, quizás podría haber cambiado el hecho, retrasarlo, o quizás era inevitable.

Hoy grabaremos Esteban, Bea y aquí el que os habla, un corto sobre la incomunicación, de eso el señor del que os hablo en un post de Internet que nada hace justicia, sabía mucho y trataba por evitarlo. Va para él de parte de otro frustrado que ha abierto los ojos un poquito.

Hasta nuestro próximo café en algún lugar donde todo sea libre y no estés atrapado, señor Cosano.